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Castell?n, 23 abr (EFE).- 'El Mil' del Poaig y su hermano peque?o, 'El Verd' del Poaig, llevan el fruto de los olivos de la comarca castellonense de El Maestrat, de m?s de 3.000 a?os de vida, a cruzar las fronteras nacionales a trav?s del aceite de oliva m?s caro del mundo.
Joaqu?n Solsona, creador de la empresa El Poaig y actor de profesi?n, ha explicado a EFE desde Par?s, donde se encuentra actuando en estos momentos, c?mo quiso recuperar la cosecha familiar de aceite y poner en valor la historia de los olivos milenarios porque "no se le ha hecho justicia en el mundo ni al aceite ni a los olivos milenarios".
La empresa castellonense ha fijado un precio de 130 euros para la botella de 500 mililitros y no tiene constancia de que exista un aceite en el mundo de mayor cuant?a econ?mica.
El nombre del primer aceite de la empresa, El Mil, hace referencia a los olivos milenarios de la zona que da nombre a la marca, El Poaig, situada entre Pe??scola, C?lig y Benicarl?.
El producto, fruto de una "reflexi?n y una investigaci?n sobre los elementos filos?ficos que hab?a detr?s de ?l", ten?a que ser diferente, explica el propietario de la empresa, "no por diferenciarse sino por poner en valor la historia que iba dentro".
Tras viajar por todo el mundo, encontr? en la empresa valenciana CuldeSac un dise?o que reflejaba, seg?n Solsona, el "esp?ritu" de su idea y que qued? plasmado en una "maravillosa" botella de cer?mica, hecha a mano y que lleva en su interior el "tesoro".
El Mil es un aceite procedente de 437 olivos milenarios de la variedad Farga, que tiene un tono verde oliva y un aroma que posee notas de hierba reci?n cortada, c?tricos, azahar y almendras.
Despu?s de un a?o naci? el "hermanito peque?o", El Verd, con la misma botella pero de tama?o reducido, con un envasado diferente con l?minas de cart?n que "caen como p?talos" y elaborado con la variedad canetera, en peligro de extinci?n, y que s?lo existe en el Maestrat.
La canetera, "tiene una caracter?stica muy especial de sabor, muy verde", dice Solsona, quien aclara que su nombre "no viene del color del aceite sino de aquello a lo que recuerda cuando lo tomas: a cosas verdes como alcachofas, hierva reci?n cortada, hojas de olivo..."
El peque?o de la familia ha sido protagonista de catas en las galer?as Harrods de Londres, donde "la gente aplaud?a cuando ca?an los p?talos", explica Solsona.
Las variedades de El Poaig se elaboran cuidadosamente en la almazara 'Baix Maestrat' en Benicarl?. La calidad del aceite es "incre?ble", porque se utiliza alta tecnolog?a que permite que el aceite nunca est? en contacto con el ox?geno para no perder propiedades.
El aceite se encuentra en dep?sitos de acero inoxidable con nitr?geno, que se renueva cada d?a.
En cuanto a la comercializaci?n del producto y sus reconocimientos internacionales, Solsona destaca que la revista Time eligi? a El Mil como uno de los 100 mejores productos del a?o y Harrods organiz? catas. "Fueron ellos los que nos dijeron: queremos ese producto", aclara el responsable de El Poaig.
Solsona cita pa?ses como China, Dubai, Emiratos ?rabes, Estados Unidos, Canad?, Singapur, Hong Kong, Taiwan, Corea, as? como varios de Europa, como destino de su producto, ya que hasta el 95 por ciento de la producci?n de El Poaig va destinado al extranjero.
En cuanto al precio, 130 euros la botella de 500 mililitros, "creo que es el m?s caro del mundo", afirma Solsona, y ha justificado su precio por su costoso proceso de elaboraci?n.
As?, desvela que la porcelana est? "hecha a mano y cada pieza es ?nica", del mismo modo que la producci?n del aceite "es m?s cara por tratarse de olivos grandes, aislados y con poco rendimiento, a los que se dedica m?s horas de trabajo y por los que se paga muy bien a los propietarios".
Actualmente producen, siempre bajo pedido, de 3.500 a 4.000 botellas al a?o de El Verd, y entre 7.000 y 8.000 de El Mil, aunque se pretende alcanzar una producci?n que ronde las 20.000 con el tiempo, puesto que las ventas "se multiplican por tres cada a?o".
EFE rta/cta